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mario cuenca sandoval

Entrevista en Diario Córdoba

Entrevista en Diario Córdoba

"Mario Cuenca Sandoval ESCRITOR : "Todo el mundo comienza a escribir por vanidad"

 

18/01/2009 ANA J. TORRES 

-A muchos escritores les da miedo un papel en blanco, ¿experimenta esta sensación incluso después de presentar su cuarto libro?

-Cada vez menos. El truco está en enfrentarse al papel cuando tenemos alguna inquietud y dejar trabajo para el día siguiente.

-Qué tiene Guerra del fin del sueño que no tengan sus otros trabajos?

-Tiene una mirada que recoge el yo más que el nosotros.

-El compromiso y esa visión social aparecen en sus obras. ¿Por qué considera que el dolor es el centro del mundo?

-Vivimos en una sociedad en la que el consumo y el ocio ocultan la realidad. Hemos enterrado al dolor bajo una capa superficial y luego nos coge por sorpresa. No hemos aprendido a interpretarlo, y mucho menos, a sobrellevarlo.

-¿Qué le queda por plasmar de esa intrahistoria que retrata a través de su poesía social y existencial?

-Todo. En el último libro hay citas de un joven que participó en las revueltas de los barrios marginales de París. La literatura no está hecha solo por maestros.

-¿Cómo se definiría a sí mismo como escritor?

--Obsesivo y perfeccionista con aquella investigación que logra conmover mis intereses.

-¿Realidad o ficción?

-Mezclados. La realidad es un género de ficción.

-¿De dónde nace su poesía y cuál es el propósito que le sigue impulsando a escribir?

-Me eduqué como lector de la Generación del 27, y eso deja huella. Todo el mundo comienza a escribir por vanidad, pero luego ese impulso se va apagando y aparece el compromiso por cada una de las obras. Lo que me mueve no es el reconocimiento, sino las obras.

- ¿Por qué cree que puede enamorar y disgustar a lectores?

-Mi poesía es árida y golpea al lector. Lo mejor es que después de esa conmoción inicial hay varios niveles en una búsqueda de la sabiduría.

-¿Cuáles son sus proyectos futuros?

-En el 2010 presentaré mi novela bélica y de boxeo El ladrón de morfina. "

Sólo hay que reseñar un error: la redactora confunde El ladrón de morfina (que es una novela bélica) con Boxeo sobre hielo.

7 comentarios

mario -

mil gracias. Tengo mis dudas sobre que deba publicar o no El ladrón de morfina. Lo dejaremos reposar una temporadita. En barbecho

Cuarentaytresbotas -

Aquí tienes otro seguro lector de El ladrón de morfina. Boxeo sobre hielo me encantó, me pareció una literatura muy valiente y muy cuidada, de lo mejor que se ha escrito últimamente en castellano, por encima de muchos autores bastantes más mediáticos.

raul perez cobo -

"Comprederemos que cualquier palabra de cualquier persona en cualquier contexto y situación es pura literatura, pura poesía pura realidad". Que algún día tengamos más gente que escribe, que no es igual que escritores, parece factible. Pero esa democratización a la que alude Andrés me parece tan inútil como ilusoria. Nicualquier palabra, ni cualquier persona, ni cualquier situación...es uno de los principales retos de algunos poetas y prosistas "actuales", tan de moda...Primero hay que leer y luego "plagiar" -en el buen sentido- para construir la voz.

Andrés -

Pues sí, Mario: la utopía está cerca. Algún día comprederemos que cualquier palabra de cualquier persona en cualquier contexto y situación es pura literatura, pura poesía, pura realidad. Cuidado con la agenda.

raúl quinto -

El ladrón de morfina... iré reservando mi ejemplar.

mario -

Pues sí, amigo. Un día habrá más escritores que lectores, porque hay quien cree que puede escribir sin leer, por ciencia infusa, y conozco casos..

Adolfo Poncela -

El problema últimamente ya no viene siendo que "todo el mundo comience a escribir por vanidad", sino que "todo el mundo comience a escribir". Terrorífico.

El otro día, después de comentar con mi cartero el avance de su última novela, y de contrastar con mi vecino un artículo que iba a enviar a prensa, abajo, en la charcutería, para mi asombro descubrí que la señora que había cogido el número 024, ¡no escribía nada en absoluto! Nada, ni un poema ni un microrrelato de una línea. La lista de la compra.